Cámaras digitales, ¿cómo elegirlas? (el sensor)
Las cámaras digitales se asocian con palabras como resolución, CCD y CMOS, pero ¿en qué debemos fijarnos?
En la segunda entrega de la guía de cámaras digitales, tras estudiar el objetivo, analizamos el sensor. El sensor es el gran protagonista de la cámara. Estos pueden ser de tipo CCD o CMOS (o alguna de sus variaciones), pero hoy en día esto ya importa poco porque no son tan diferentes como hace años. Parece que finalmente ya no nos volvemos locos con la resolución y el número de megapíxeles, ya que este dato sólo afecta de forma directa al tamaño máximo de impresión sin interpolación. Es cierto que una buena resolución es importante, pero hoy en día todas las cámaras ofrecen más de 6 Mpx lo que supone ampliaciones de aproximadamente un A3. Sin embargo, hay que tener en cuenta que los sensores disponen de diferentes tecnologías de fabricación y ello también redunda en el ruido, o grano digital, que generan en alta sensibilidad, es decir ISO de 800 y más. Elegir sensores con poco ruido y que capten imágenes con poca luz es muy importante, tanto como que sea capaz de captar un amplio rango dinámico, lo que permitirá no perder detalles en las luces y en las sombras en las escenas con cierto contraste. Ligado al sensor se puede encontrar el sistema de limpieza antipolvo, y aunque la cámara no sea de objetivos intercambiables, es una buena idea contar con esta característica para mantener el captor siempre impecable.
En las cámaras réflex digitales (D-SLR), empieza a resultar interesante que el captor sea de tipo LiveMOS y que disponga de la funcion Live View, que permite ver en la pantalla LCD la misma imagen que está recibiendo el sensor, de forma similar a como ocurre en las compactas. En este tipo de cámaras es necesario conocer el tamaño del sensor, ya que nos indicará el factor de conversión que hay que aplicar a los objetivos, para conocer la focal equivalente. Cuanto más se parezca el tamaño del sensor al clásico 24x36mm (full frame), menor será este factor. Un mayor tamaño también redunda en una menor cantidad de ruido en la imagen, pero esto es matizable según la calidad del sensor.
Por lo tanto, hay que fijarse en todas las características que tiene el sensor. La resolución es una de ellas y es importante, pero no es la única y según el tipo de fotos que hagamos, incluso puede no ser de las prioritarias.