El coche de Google culpable de su primer accidente
La culpa ha sido suya, ¿tendrá el seguro a terceros?
Una de las grandes promesas de Google, en su esperado sistema de vehículos sin conductor, es que estos harán las carreteras más seguras. En teoría estos vehículos al poder conectarse unos a los otros pueden compartir datos de su trayectoria para que dos de ellos nunca se choquen. El problema es que los humanos somos todo lo contrario.
Aunque los vehículos sin conductor de Google han tenido accidentes, esta es la primera vez que en uno de ellos ha sido culpa del propio coche. Nada muy grave, un error de cálculo llevó a un pequeño golpe entre uno de sus coches y otro vehículo.
Todo ha pasado en una calle de tres carriles donde estos coches ya han recorrido muchos kilómetros, han reconocido otros coches y señales de todo tipo. Pero no todo es perfecto.
Según Google y el conductor responsable de ese coche, un Lexus RX450h, al ver acercarse por la izquierda a un autobús, pensaron (tanto el conductor como el vehículo) que este cedería el paso en una intersección. El problema llegó al intentar «negociar» para cambiarse de carril, ya que el coche tenía que cambiar al carril central para poder hacer un giro a la derecha al ver que el carril para estos giros estaba bloqueado.
El coche creía que el autobús pararía, el autobús no paró, lo que resulto en un pequeño incidente en el que ambos conductores tuvieron que dar parte. En este caso la culpa la tenía el coche de Google porque debía ceder el paso como ya había hecho antes.
Estos errores son bastante valiosos para esta tecnología, todos los errores de conducción y esos patrones de conductas de los humanos al volante son buenos para mejorar la experiencia del sistema de Google, cuya meta es la de que estos sepan adelantarse a todas las situaciones posibles de la carretera.
+ Info | The Verge