Este robot-abeja es capaz de bucear y volar gracias a sus pequeños propulsores
RoboBee usa la electrólisis del agua para obtener oxígeno combustible y poder volar
Inspirado en insectos, los pequeños robots de la Universidad de Harvard avanzan con un pequeño, pero gran avance. Ahora estos robots llamados RoboBee son capaces de volar y de nadar, gracias a una pequeña propulsión de un cohete que usa agua.
RoboBee está planteado como un robot volador que puede llegar a reemplazar, en caso de necesitarse, el papel de las abejas para polinizar flores. Las abejas se mueren, a un ritmo que debería asustar más de lo que lo hace, por eso estos micro robots son tan importantes.
Este pequeño robot ya demostró como era capaz de volar, pero ahora además es capaz de nadar. Uno de los mayores problemas a los que se enfrentan los ingenieros y científicos de Harvard era cómo hacer que pudiese despegar desde el agua. Pese a que sólo pesa 175 miligramos, la tensión superficial del agua es 10 veces su peso, lo que le hace casi imposible salir del agua. Es como darse contra un muro de piedra.
Para lograr romper esa tensión que le impide moverse del agua al aire, le han dotado de un pequeño cohete a combustión que le da el impulso necesario. Y es exactamente esto lo más inteligente de su diseño, usa el agua como ‘combustible’.
El nuevo diseño de RoboBee utiliza dos pequeñas placas electrolíticas. Estas, al encenderse provocan una reacción que convierte el líquido en oxihidrógeno (hidrógeno diatómico y oxígeno), lo que produce una combustión suficiente como para romper esa barrera y salir a la superficie.
Como robots pensados para ser reemplazos de animales y, por qué no decirlo, también como posibles sistemas de espionaje, es vital que RoboBee sea capaz de esconderse o de adaptarse a todos los elementos.