#MWC2013 Nokia 105, el «más barato imposible» de la telefonía móvil

Quién te ha visto y quién te ve, Nokia. Eso han debido pensar muchos de los asistentes al Mobile World Congress de Barcelona, que han observado cómo la empresa finlandesa, antaño líder en la gama alta del mercado de telefonía móvil, ahora lanzar terminales de la gama más baja, con los que intentar conseguir cuota de mercado en países emergentes. Uno de estos móviles es el Nokia 105, un teléfono móvil resistente y funcional, antiguas señas de identidad de Nokia, por tan sólo 15 euros.

Especificaciones técnicas: lo justo y necesario

El Nokia 105 es el terminal más bajo de una serie de móviles pensados para mercados emergentes con escasos recursos económicos, pero con posibilidades de crecimiento. Éste teléfono móvil, sobrio en su apariencia externa, tiene un teclado físico y una pantalla de 1’45 pulgadas en color. Además, se sabe que el 105 cuenta con 8 MB de ROM para almacenamiento interno, 384 KB de RAM, radio FM, un LED superior y un conector jack de 3’5mm. Y ya está. Éste es el alarde de tecnología con que se presenta el 105. No esperéis procesadores Quad Core, gigas de RAM, NFC, ni cosas así; estamos hablando de un dispositivo con unas características que parecen sacadas de principios de siglo. De hecho, para encontrar pantallas en color de ese tamaño (aunque de peor calidad), tenemos que irnos más o menos al año 2002, a modelos como el Nokia 3510i, que muchos recordamos con nostalgia.

Pensado para no quedarse incomunicado

Sin embargo, no todas sus características son tan poco atractivas. El terminal es resistente al agua (no como para llevártelo a bucear, pero sí frente a salpicaduras y tal) y al polvo, y además su batería le ofrece una autonomía de… (atención) ¡hasta 35 días en espera! uno de sus puntos fuertes, sin duda. Está, por tanto, bien pensado para entornos menos amigables para el teléfono, y para situaciones en las que quizá tengamos que estar bastantes días sin poder recargarlo.

Disponibilidad y precio

El 105 se pondrá a la venta en color negro y cyan, por el más que asequible precio de 15 euros sin IVA, en el primer trimestre del año. Sus mercados serán China, Egipto, India, Indonesia, Nigeria, Rusia, Vietnam, y otras áreas de África, Europa, Asia Pacífico y Oriente Medio. Puede parecer una estrategia descabellada lanzar un teléfono así en el Mobile World Congress, cuando el resto de fabricantes están sacando músculo mostrando sus dispositivos de última generación. Pero quizá no sea ninguna tontería, si pensamos que Nokia intenta llegar a los más de 2.700 millones de personas que no tienen aún teléfono móvil en el mundo. Adaptarse a las necesidades de cada usuario puede llevar a Nokia a aumentar sus ingresos, aprovechando nichos con un gran potencial de crecimiento.

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