El televisor más grande del mundo tiene 262 pulgadas y cuesta casi medio millón de euros

Los viejos televisores de tubo llegaron a tener tamaños de pantalla relativamente grandes, pero estaban lastrados por el inevitable ‘culo’ donde se alojaba el tubo de rayos catódicos. Este formato caja desapareció con la llegada de las pantallas planas que permitían tener una área de pantalla tan grande como estuviésemos dispuestos a pagar, sin penalizar el volumen del conjunto.

Bueno, más o menos. Porque siempre existen limitaciones técnicas en la fabricación de paneles de grandes dimensiones. Lo habitual ahora es un tamaño cercano a las 40 pulgadas que es una monstruosidad si se compara con los CRT. Pero si de verdad quieres llegar al límite y no tienes problemas de dinero aquí está el C Seed 262, cuyo nombre ya indica las pulgadas de la diagonal: 262 (unos 6,65 metros).

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El S seed 262 es un televisor de dimensiones generosas, 6×2,5 metros, pero sorprendentemente mantiene una resolución estándar 4K. Es decir, 4K está muy bien para la alta gama de tamaño normal de entre 60 y 80 pulgadas, pero puede quedarse algo escasa si se lleva a dimensiones tan exageradas como el C Seed. De hecho Existen televisores prototipo de menor tamaño que ya trabajan a 8K. Eso sí, en el apartado acústico cuenta con 10 altavoces para un sistema envolvente 9.1.

El resto de sus características son bastante normalitas. Un panel de tecnología LED con un brillo máximo de 800 nits y un contraste 5000:1. Como detalle de lujo, además del diseño Porsche Design, integra una tela motorizada que cubre el panel cuando no está en uso. Eso sí su precio es acorde con su tamaño: 490.000 euros. A esto es probable que haya que añadir 35.000 euros de la instalación ya que los 800 kilos del conjunto, deben ser manejados con cuidado.